Arrancamos nuestro paleo de hoy desde Los Baños de la Reina de Calp. Haremos una rápida visita al Conjunto Termal de La Muntanyeta, justo en la pequeña playa que está antes del espolón La Puntera, y pasaremos el espigón hasta llegar a la larga playa de Arenal-Bol, más de un kilómetro de arena dorada y aguas trasparentes.
Justo pasando el espigón del sur nos encontramos con una construcción curiosa, los restos de un antiguo Club Social. A continuación, encontraremos la cala Manzanera, la reconoceremos fácilmente por los emblemáticos edificios que asoman por un pequeño acantilado, obras del arquitecto Ricardo Bofill.
Continuaremos nuestra navegación con la vista puesta en nuestro siguiente reto: el Morro de Toix. La ruta por este tramo, con buenas condiciones, nos permitirá acercarnos a los acantilados blancos, que nos acompañarán hasta llegar a Puerto Blanco.
Una vez superado el puerto nos encontraremos con la cala de Les Urques y, tras 700 metros de paleo, pasaremos por cala Gasparet, una calita de 80 metros de longitud y 7 metros de anchura, ideal para tomar un respiro y darnos un buen baño. Es de grava y cantos rodados.
Tras estos momentos de calma retomaremos la navegación para costear el Morro de Toix y llegar a su cara sur. Allí nos encontraremos bajo unos impresionantes acantilados, completamente verticales y de más de 200 metros de altura sobre el nivel del mar.
El Morro de Toix constituye la terminación en el mar de la sierra de Bèrnia. En él encontraremos antiguas pesqueras, iguales o más impresionantes que las vistas durante la etapa Granadella-Teulada/Moraira. Algunas de ellas arrancan desde la parte más vertical de la montaña, aprovechando ventanas naturales que no nos dejarán indiferentes.
Tras los altos acantilados llegaremos a la cala El Collao o Racó del Corb, especialmente recomendada para la práctica del buceo. La dejaremos atrás y entraremos en territorio natural de Altea. Superaremos la pequeña Punta del Mascarat para llegar a la playa del mismo nombre.
Altea cuenta con más de 6 kilómetros de playas. No suelen estar masificadas ya que la mayoría de ellas son de canto rodado. La tranquilidad y el relax suelen ser las grandes fortalezas de este pintoresco municipio de la Costa Blanca.
Tras la playa del Mascarat, dejaremos a nuestra derecha el Club Náutico Campomanes. Continuaremos y veremos cómo los acantilados cobran un tamaño importante hasta llegar a la playa de La Solsida que nos abre el camino hasta el Puerto Mar i Muntanya.
Seguidamente l'Illeta de l'Olla (a la izquierda) y su playa (a la derecha) nos dan la bienvenida. En esta zona se realiza en verano, el segundo sábado de agosto, un impresionante espectáculo piromusical, El Castell de l'Olla. Un hermoso estallido de luz, pólvora y música.
La larga playa nos llevará al Cap Negret, un pequeño cabo de rocas negruzcas producto de un afloramiento volcánico y con alguna construcción singular como los nidos de ametralladoras en la playa.
Continuaremos nuestra navegación atravesando las largas playas de toda la bahía alteana, pasando por la desembocadura del río Algar, hasta llegar al Club Náutico. Es interesante hacer dos breves paradas, una para ver los restos de las antiguas torretas de vigilancia, y otra para ver la curiosa y pequeña playa que protege el espigón.
En apenas 2 kilómetros pasaremos por la playa del Cap Blanc hasta llegar a nuestro punto final propuesto para hoy, la playa de L'Albir, en L'Alfàs del Pi.