Murla es la Capital de la pelota valenciana, hay una escuela que la enseña y los mejores jugadores de la comunidad lo han hecho en sus estrechas y frescas calles. Los jugadores locales gozan de fama dentro del mundo de la pelota y uno de los mejores de la historia, el Nel de Murla, tiene placa y plaza en el pueblo donde nació. Todas las tardes de los fines de semana hay partida en la localidad.
El pueblo es de agudo tipismo con su curiosa Iglesia-Fortaleza de cripas iluminadas y torres reconstruidas, sus farolas modernas, las fachadas modernistas y la gente sentada en sillas al borde de la carretera viendo pasar los escasos coches o haciéndose una cerveza lo caracterizan.