Los 25 clubes náuticos y puertos deportivos ofrecen infinidad de
posibilidades para disfrutar del windsurf, la vela, el buceo o el remo
La belleza de la costa y la calidez del Mediterráneo se alía con los amantes de las actividades náuticas a lo largo de todo el año. Son 25 clubes náuticos y puertos deportivos, con más de 10.000 amarres, los que salpican el litoral proporcionando unas infraestructuras de máximo nivel que incita a la práctica de estos deportes a la vez que se convierten en vigía del respeto al medio ambiente y a los fondos marinos.
El Mediterráneo permite disfrutar de sus aguas en la superficie y también en sus fondos, algunos de ellos protegidos, como el caso de la Reserva Marina de Tabarca y la Reserva Natural del Cabo de San Antonio, entre Dénia y Jávea. Para los submarinistas hay rincones paradisiacos de flora y fauna marina. La vela es una de las prácticas con mayor acogida, en una zona de vientos suaves y numerosas escuelas de iniciación. A ello se unen el windsurf, el kitesurf, el esquí acuático, las motos acuáticas, el piragüismo, el remo y una infinidad de actividades.
A todo esto hay que añadir que la Costa Blanca acoge competiciones náuticas y citas deportivas a lo largo de todo el año. La más destacada, la salida de la Volvo Ocean Race cada tres años desde Alicante, ha dado lugar a todo un despliegue de actividades e instalaciones relacionadas con la prueba, como el Museo que lleva su nombre. También merece atención la Regata 200 millas a2 de Altea.