El agua es el motor del mundo pero no siempre somos conscientes de su importancia. Las siguientes 10 Rutas del Azules por la Costa Blanca se convierten en la mejor forma para disfrutar de la naturaleza y apreciar y convervar nuestro patrimonio hidrológico
Leonardo Da Vinci se refirió una vez al agua como "la fuerza motriz de toda la naturaleza": el mar que dibuja las costas, los ríos que atraen vida o los pozos que sustentan a comunidades enteras.
El agua no solo es sinónimo de vida, sino que transforma por completo el medio dibujando nuevas formas como ríos, manantiales, humedales, cuevas, barrancos o cascadas. Lugares de cuento que puedes disfrutar a través de las siguientes 10 Rutas Azules de la Costa Blanca.
De fuente a fuente: Ríos Guadalest y Algar
El amplio conjunto de fuentes nacidas de los deshielos de las montañas caracteriza esta ruta que marca la transición entre el interior y la costa de Alicante. El sonido del agua borbotea en lugares solitarios y agrestes a lo largo de 58 km de ruta que discurre entre municipios como Confrides, Benifato, El Castell de Guadalest o Callosa d'en Sarrià, entre otros. Un itinerario fragante de nísperos y limoneros, vigilada en algunos tramos por el castillo de Guadalest, y cuyo gran clímax supone bañarse en les Fonts del Algar.
Siguiendo el río más largo de la Costa Blanca: Alto y Medio Vinalopó
El río más largo de la provincia de Alicante nace en la Sierra de Mariola hasta alcanzar las Salinas de Santa Pola. 92 km de cauce que conforman el Alto, Medio y Bajo Vinalopó, áreas llenas de vida y contrastes: la Font de la Coveta, en el tramo más alto del río; la Fuente del Sapo, a la cual se atribuyen propiedades curativas; o el cauce "tinto" que salpica el Barranco de la Sal son algunos de los principales lugares de interés de la ruta.
De ríos y sal: Baix Vinalopó y la Vega Baja
La mejor ruta azul por la Vega Baja de Alicante discurre a lo largo de 120 km atravesando poblaciones como Elche, Santa Pola o Torrevieja. Ante el excursionista se despliega un mundo nuevo tapizado de cultivos, lagunas rosadas y montañas de sal que forman un arco iris de posibilidades: desde los colores de la Rambla Salada de Albatera hasta el humedal que conforma la desembocadura del río Segura, pasando por los flamencos que sobrevuelan el Parque Natural El Hondo.
Entre playas y humedales: Marjal de Pego - Oliva
Esta ruta de 30 km surca el famoso humedal situado al norte de la provincia de Alicante, abrazado entre las montañas y el mar. Las nubes de aves del marjal, la belleza escénica del mirador de la Muntayeta Verda, o la Balsa de Sineu, son los principales atractivos de esta ruta que puede realizarse tanto en coche como en bicicleta.
Viajar al pasado entre pueblos y montañas: el Río Agres
Si buscas viajar en el tiempo, la ruta del agua a través del río Agres es perfecta. Los antiguos molinos harineros construidos en la roca, pasear por calles de los pueblos de Alfafara y Agres, y la naturaleza de la vertiente norte de la Sierra de Mariola dibujan una experiencia única. Esta ruta, una de las más bonitas de la Costa Blanca, transcurre a lo largo de 9 km entre los municipios de Agres y Alfafara, en el extremo norte de la provincia de Alicante.
Encanto árabe: ruta entre los ríos Amadorio, Sella y Penáguila
La señal de que has llegado será cuando dejes atrás los rascacielos de Benidorm. A partir de entonces, todo puede pasar a través de esta ruta que transcurre a lo largo de 60 km entre los municipios de Villajoyosa, Orxeta, Sella, Relleu, Alcoleja y Penàguila. El punto de partida lo marca el embalse del Amadorio, para continuar por los saltos de agua de Sella; la herencia árabe de Alcoleja; o el exótico Jardín de Santos de Penàguila, un oasis de esculturas, estalactitas y palmeras.
Ruta por cuevas y tesoros: Dénia y Benitatxell
La espeleología, o el arte de adentrarse en cuevas, se ha convertido en una tipología de turismo activo que encuentra en la porción de costa entre Dénia y Benitatxell el mejor escenario. Desde la Cova de l'Aigua Dolça en Dénia seguimos las aguas subterráneas del río Gorgos y sus ríos "perdedores" (o que se infiltran en la tierra), para terminar con un chapuzón en las aguas de ensueño de la playa del Moraig, la mejor recompensa tras alcanzar la Cova dels Arcs. La ruta que habría encantado a cualquier pirata tras guardar sus tesoros.
La ruta de las cascadas siguiendo el río Serpis
Pocas sensaciones se comparan al sonido de una cascada tras una apasionante ruta, como la que transcurre entre las comarcas de La Safor, El Comtat y la Marina Alta. El punto de partida es la localidad de L'Orxa, donde tomaremos la Vía Verde del río Serpis como referencia antes de perderse entre barrancos como La Encantada o los diferentes elementos tales como molinos y acueductos ligados al agua durante siglos.
La ruta donde se unen la tierra y el cielo
Ocres, violetas, marrones y rojizos. La paleta cromática de los entornos arcillosos del cauce del río Monnegre retan al azul del cielo a través de cañones y canales, regueros y barrancos fascinantes. Esta ruta de 53 km supone un viaje al inhóspito Triásico a través de las badlands, o formaciones arcillo-arenosas desde las que acceder al embalse de Tibi, los baños Busot o las míticas cuevas de Canelobre.
Hasta la cumbre más alta: Sierra Aitana
La Sierra de la Aitana es considerada como la cumbre más alta de la provincia de Alicante con sus 1.557 metros sobre el nivel del mar. El mejor mirador para el final de una ruta de 32 km que podemos realizar a pie durante dos días, o por tramos. La mayoría de rutas comienzan en Sella, dejando el vehículo en la Font del Pouet Alemany, hasta atravesar les Avencs de Partagat, un conjunto de somas a 700 metros del pico.
Puedes descargar los mapas e itinerarios de todas las rutas azules en el siguiente link.